La derecha bruta y achorada en el juego del cuy
Las elecciones 2016 empezaron con una gran mentira
construida por el Grupo El Comercio buscando garantizar los intereses
económicos de los grupos chilenos en nuestra economía, fue así como nos
presentaron la triada, Keiko, PPK, Alan García. Con el discurso ridículo de ser
candidatos que estarían virando hacia la izquierda.
Entonces PPK salía señalando que estaba en conversaciones
con Patria Roja, Keiko afinaba su discurso reconociendo las barbaridades del
gobierno de su padre y su opción por los pobres, y García señalaba la necesidad
de industrializar el país, cosa que nunca hicieron cuando estuvieron en el
poder.
La pregunta que surge es la siguiente ¿por qué estos
candidatos de la derecha pro-chilena tendrían que decir que eran de izquierda,
si antes lo habían sido de la derecha más cavernaria que haya tenido el Perú?
¿Qué los hizo realizar ese giro de 180° en una pista de un solo carril con el
riesgo de desbarrancarse? La respuesta salta por sí misma, los sondeos daban a
conocer que la gente votaría por una opción radical, por una opción de cambio
real de modelo y no de maquillajes, lo
que alertó a estos candidatos a decir entonces que desde ahora eran la opción
de izquierda.
Entonces aprovechando el control total de los medios de
comunicación comenzaron a mover la caja en donde encerraron al público cautivo
y empezaron a agitarla, buscando que el cuy aturdido ingresase en las puertas
que ellos ya habían confeccionado, PPK,
GARCÍA, KEIKO. Dos partidos tuvieron que ser incorporados en este juego, APP de Acuña y TPP de Julio Guzmán, el primero representando
a los políticos emprendedores, informales y hasta ilegales, que deseaban una
curul para realizar su sueño personales y los segundos al otro sector de la derecha (El grupo
Belmont) que aún no tiene representatividad política pero que en estas
elecciones pugnaba por pelear una cuota de poder.
Esta aparición les generaba un ruido político que les impedía
garantizar el triunfo de sus alfiles por lo que decidieron bajarlos del
partidor, logrando este objetivo con la resolución emitida por el JNE, en donde
desinflaba estas aspiraciones políticas, pensando que con esto se levantaría la
candidatura de García, PPK y Keiko, pero las calles no seguirían el juego de la
DBA y gran parte de este apoyo se trasladaría a Barnechea y Verónica.
Entonces reconfigurarían su estrategia buscando impulsar
la candidatura de Barnechea a quién
consideran más afín a ellos por su pasado aprista y su vocación natural al
lobby y esto se ve reflejado en el apoyo que en el Callao el grupo de Chimpum
Callao representado en Moreno y Sotomayor están dando al candidato por la lampa
Paul García que va con el # 1 por AP, este apoyo ya es destacado por las redes sociales
y es la comidilla del día en todo el puerto.
A Verónica empezaron invisibilizandola, desapareciéndola de
las encuestas y no destacándola en las noticias del día, pero como el apoyo
hacía su candidatura es ya indetenible entonces han empezado a aplicar el plan
B, agitar el miedo, que es el último recurso de la derecha para frenar su
exponencial crecimiento, “ella es Chavista”, “el perito dice que unos números
son de su puño y letra”, “ella es la candidata de Nadine”, “por qué no habla el
cura Arana”, es decir, aterrorizar al elector ya que el desborde que se viene es
incontenible.
Una vez más la derecha buscará sacar el cuco a relucir
en las calles, esperando que alguna de las mentiras queden, pues de lo contrario los grupos
económicos chilenos verían perder los beneficios logrados durante estas dos
décadas pérdidas para el Perú, en donde las empresas estratégicas se regalaron
y en donde nuestros recursos naturales pasaron a manos de empresas depredadoras
del medio ambiente y que poco o nada de ingresos dejan a las arcas del Estado
peruano si es que nos comparamos con Bolivia en ese mismo período.
El Grupo el Comercio arremeterá en estas últimas semanas con
todo contra Verónica pues se juegan los intereses económicos de los empresarios
chilenos y de la derecha traidora y vende-patria, cerrar filas en torno a
Verónica es la única opción respetable que le queda al pueblo peruano.
